Un mundo de ILUSIONES

Este lugar es habitado por las niñas y los niños perdidos liderados por el héroe o quizás heroína, Peter Pan. La población de dicho país agrupa también a temibles piratas como el Capitán Garfio y salvajes indios. Otros tipos de seres como el hada, Campanilla y el Cocodrilo que se llevó la mano del Capitán Garfio habitan este lugar donde el tiempo no avanza y las aventuras predominan por cualquier rincón. De acuerdo con la leyenda, si alguien desea llegar a este lugar deberá de girar la segunda estrella a la derecha, volando hasta el amanecer.

sábado, 18 de abril de 2009

Buscando la Felicidad...

A TIEMPO
Cuenta la leyenda que un hombre oyó decir que la felicidad era un tesoro.
A partir de aquel instante comenzó a buscarla. Primero se aventuró por el
placer y por todo lo sensual, luego por el poder y la riqueza, después por
la fama y la gloria, y así fue recorriendo el mundo del orgullo, del saber, de
los viajes, del trabajo, del ocio y de todo cuanto estaba al alcance de su mano.
En un recodo del camino vio un letrero que decía : Le quedan dos meses de vida .
Aquel hombre, cansado y desgastado por los sinsabores de la vida se dijo:
- Estos dos meses los dedicaré a compartir todo lo que tengo de experiencia,
de saber y de vida con las personas que me rodean .
Y aquel buscador infatigable de la felicidad, sólo al final de sus días,
encontró que en su interior, en lo que podía compartir, en el tiempo que le
dedicaba a los demás, en la renuncia que hacía de sí mismo por servir
estaba el tesoro que tanto había deseado.
Comprendió que para ser feliz se necesita amar; aceptar la vida como
viene; disfrutar de lo pequeño y de lo grande; conocerse a sí mismo y
aceptarse así como se es; sentirse querido y valorado, pero también querer y
valorar; tener razones para vivir y esperar y también razones para morir
y descansar.
Entendió que la felicidad brota en el corazón, con el rocío del
cariño, la ternura y la comprensión. Que son instantes y momentos de
plenitud y bienestar; que está unida y ligada a la forma de ver a la gente
y de relacionarse con ella; que siempre está de salida y que para tenerla
hay que gozar de paz interior.
Finalmente descubrió que cada edad tiene su propia medida de felicidad .
Y en su mente recordó aquella sentencia que dice:
" Cuánto gozamos con lo poco que tenemos y cuanto
sufrimos por lo mucho que anhelamos "

No hay comentarios: