Un mundo de ILUSIONES

Este lugar es habitado por las niñas y los niños perdidos liderados por el héroe o quizás heroína, Peter Pan. La población de dicho país agrupa también a temibles piratas como el Capitán Garfio y salvajes indios. Otros tipos de seres como el hada, Campanilla y el Cocodrilo que se llevó la mano del Capitán Garfio habitan este lugar donde el tiempo no avanza y las aventuras predominan por cualquier rincón. De acuerdo con la leyenda, si alguien desea llegar a este lugar deberá de girar la segunda estrella a la derecha, volando hasta el amanecer.

sábado, 17 de enero de 2009

Es la confianza lo que nos da el valor que nos permite fluir y aprender


EL RÍO DE LA VIDA
El río nacía en los picos de una formidable montaña y saltaba, embravecido, soltando brillantes gotitas que relucían al sol. Nada detenía su paso. Cuando un obstáculo se interponía en su camino, lo saltaba, lo atravesaba o lo bordeaba. Era valiente, osado, generoso y flexible.
Un día llegó a las cálidas arenas de un desierto y se lanzó a atravesarlo. Pero pronto se dio cuenta de que sus aguas desaparecían en la arena, y se asustó. Aunque fue considerando las más diversas alternativas, no encontraba ninguna solución. Inmerso en sus dudas, oyó una voz que le decía:
- El viento cruza el desierto y también lo puede hacer el río.
- El viento puede volar y yo no – respondió.
- Si te lanzas con violencia, como has hecho hasta ahora, no conseguirás cruzar el desierto – dijo la voz-. Debes dejar que el viento te lleve a tu destino.
- Pero, ¿cómo me va a llevar?
- Debes consentir ser absorbido por el viento – afirmó la misteriosa voz.
Esta idea no era aceptable para el río. No quería perder su identidad y era demasiado arriesgado ponerse en manos de un viento desconocido.
- ¿Y si, cuando haya perdido mi forma, no puedo recuperarla d e nuevo? – se angustió.
- El viento cumple su función – respondió la voz-. Eleva el agua, la transporta a su destino y la deja caer en forma de lluvia. Entonces, el agua vuelve al río.
- Pero, ¿no podría seguir siendo siempre el mismo que soy ahora?
- En ningún caso puedes permanecer igual. Tu esencia debe ser transportada para formar un nuevo río.
El río desconfiaba de la voz; podía perderlo todo si le hacía caso. Pero una vocecita interior le decía que fuera valiente y asumiera el riesgo. Entonces, en un formidable acto de confianza, elevó sus vapores en los acogedores brazos del viento, que lo trasladó hasta la cima de una montaña lejana, donde lo dejó caer. A medida que las gotas de agua caían y se volvían a reunir formando un riachuelo, algo parecido a la felicidad embargó al río. Y, de repente, lo comprendió todo:
- Mi esencia es el agua, sea en el estado que sea. Al transformarme, he podido continuar siendo yo mismo. De no haberlo hecho, me hubiera perdido.

Extraído de Aplícate el cuento: relatos de ecología emocional; de Mercé Conangla y Jaume Soler

1 comentario:

Jaime Riba dijo...

holaaaa! me paso a dejarte una firmitaa! :) que hacia un tiempecito que no me pasaba! xDD esqe he estado muy ocupado con teatro, estudios,... U.U pero este finde no! xDD muchos besos! chao!

Jaime